Verstappen gana fácilmente el Gran Premio de Japón de F1 y se acerca al título. El Checo sin suerte
Red Bull superó el récord de McLaren de 1988 de más victorias consecutivas, en la temporada 2023, estableciendo nuevos puntos de referencia de 14 victorias consecutivas en una temporada y 15 victorias consecutivas en general.
«Ha sido la carrera más increíble para nosotros y el año más increíble. Es un testimonio de estos muchachos: todos los hombres y mujeres en la fábrica de Milton Keynes», dijo el jefe del equipo, Christian Horner.
«Para Red Bull y todos nuestros socios, es una colección de un esfuerzo increíble de todos poniendo su granito de arena para lograr resultados como los que hemos logrado nosotros y Max está en otro nivel en este momento».
A falta de seis carreras, Red Bull ahora buscará superar el récord de Mercedes de más victorias en una sola temporada, que es de 19 con respecto a 2016.
Mientras tanto, Verstappen tendrá su primera oportunidad de conseguir su tercer campeonato mundial consecutivo en el GP de Qatar, y el próximo fin de semana de Sprint será del 6 al 8 de octubre.
Las dificultades de Pérez significan que Verstappen podría coronarse campeón el sábado de ese fin de semana. Su contacto con Hamilton había sido la causa del coche de seguridad en la primera vuelta y después de mayores daños al realizar un intento desesperado de adelantar a Magnussen, el mexicano se retiró por primera vez en la vuelta 15.
Reapareció brevemente en la vuelta 39 para que Red Bull le permitiera cumplir su penalización de cinco segundos por la colisión de Magnussen, antes de abandonar la carrera nuevamente en la vuelta 42.
El Checo sin suerte
Fue un fin de semana en Japón más difícil para Sergio Pérez, que se clasificó a siete décimas de segundo de su compañero de equipo en quinto lugar, calificando su vuelta en la Q3 como «desagradable» después de tener problemas con el equilibrio del coche en las curvas cerradas de Suzuka.
El mexicano tuvo problemas inmediatamente al inicio, el contacto con el Mercedes de Lewis Hamilton en el sprint hacia la primera curva requirió una parada en boxes no programada para un nuevo alerón delantero.
Una penalización de cinco segundos por una infracción del coche de seguridad se sumó a su dolor, y un nuevo choque con el Haas de Kevin Magnussen en la vuelta 12, cuando regresaba por el campo, le hizo sufrir más daños.
Se retiró de la carrera en la vuelta 14, pero se reincorporó en la vuelta 40 durante dos vueltas para cumplir una penalización de cinco segundos por el incidente de Magnussen, evitando que se trasladara a la siguiente carrera en Qatar.